Consejos que te ayudarán a enfrentar el síndrome post-vaciones

No todas las personas nos adaptamos de igual manera a los cambios y para algunas ell regreso a la oficina puede resultar complejo. Luego de pasar semanas o incluso meses libres del estrés laboral, preocupaciones y manteniendo una alimentación distinta a lo habitual, se pueden presentar desde cambios metabólicos a dificultades en la concentración.

Volver a la rutina y al trabajo luego de las vacaciones puede provocar el “síndrome post-vacaciones” como lo conocemos popularmente. Trae consigo aparejado desde pesadez estomacal y estreñimiento, hasta dificultad para concentrarse o despertar con poco ánimo. Son algunos de los síntomas que se pueden manifestar en el retorno del receso, donde fuimos de viaje, a la playa, al campo, la montaña y disfrutamos junto a nuestras familias.

Llevar un proceso de adaptación gradual a nuestra rutina es uno de los principales consejos que entregan los especialistas, debido a que este “síndrome” parece ser más común de lo que uno podría pensar. “Se ha definido el Síndrome Post-Vacaciones o Post-holiday Blues, como una ansiedad difusa, que incrementa la irritabilidad, el sentimiento de nostalgia, los problemas de sueño y el malestar en general”, así lo destaca Mauricio Droguett, psiquiatra de Clínica Las Condes. Quien además agrega que esta es una sintomatología normal, adaptativa, que varía entre cada persona y que debiese desaparecer progresivamente en el transcurso de las dos primeras semanas del retorno al trabajo.

Algunos consejos que se pueden utilizar para evitar el estrés en la vuelta al trabajo son:

1.- Armar una lista de los tareas o quehaceres pre-vacaciones: Esta es una buena forma de evitar la sobre carga de trabajo al regreso de las vacaciones, teniendo un listado claro, preciso y ordenado de todo lo que debes hacer en el reintegro laboral.

2.- Hacer un retorno progresivo de la actividad laboral: Dentro de lo posible, iniciar la actividad laboral de manera suave en los primeros días o anticipar el retorno de las vacaciones en1 o 2 días, para no regresar directamente al primer día de trabajo.

3.-Volver a los hábitos saludables de alimentación: Bajar la ingesta de alcohol y azúcar, ya que ambos son alimentos que se relacionan con la depresión. Favorecer una dieta balanceada y rica en rica en nutrientes

4.- No suprimir del todo las actividades sociales y recreativas: Siempre es sano, para el cuerpo y mente, mantener la actividad social activa.

5.- Realizar alguna actividad física fuera del trabajo: Hacer deporte o ejercicios ayuda no sólo en lo físico, si no que en lo mental. Se puede complementar con técnicas de meditación y relajación.

6.- Consumir frutas y verduras: Consumir frutos ricos en antioxidantes como frutillas, frambuesas y arándanos.

Fuente: Clínica Las Condes

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